viernes, 30 de mayo de 2008

Qué vida la mia

Qué semana! Después de tanta cosa me he puesto a pensar que la vida de un comunicador es muy difícil. Creo que al final de todos los trabajales que a uno de le dejan, que hay que investigar esto o aquello, uno se mata y vaya que mucho...


No sé creo que terminaré amando a mi profe de perio, por enseñarnos a trabajar de la forma en la que él nos hace trabajar. No es fácil tooodo lo que nos deja, pero sea como sea, uno puede aprender a pensar. ¿Aprender a pensar?, qué raro se escucha eso. Pero bueno, siento que estoy nutriendo mi conocimiento. Lo chistoso es que durante esta semana, he hecho tantas entrevistas, tantos sondeos, tantas estrategias de comunicación para hacer gestiones, he ido a tantas conferencias, pero lo mejor de todo: he visto a un profesor rodar una lágrima...muchas cosas vea. Pero la verdad esta última cosa no la olvidaré: vi a mi profe llorar, bueno no llorar, pero sí ponerse sentimental mientras estaba como ponente en una conferencia. !Esas cosas no se olvidan!

Por cosas como estas, es por lo que digo que a pesar del cansancio, de que todo esto implique vivir en la u, que se tenga que hacer muchas preguntas, y que se deba de dormir menos, es bueno ser Comunicador...

1 comentario:

Gabriela Castellón dijo...

Holap! Pues es cierto. Esas cosas nunca se olvidan. por otro lado, creo que todas esas cosas, que van en aumento cada día, son las que nos van a a fortalecer en nuestra "vida laboral". No hay que quejarnos tanto, al fin y al cabo, no sabemos con qué cosas nos vamos a topar a donde "de verdad asustan"!!.. Ja, ja!..